Con el objetivo de fortalecer la competitividad gastronómica regional mediante prácticas sostenibles e inocuas, la carrera de Nutrición y Dietética de la Facultad de Ciencias de la Salud y de los Alimentos de la Universidad del Bío-Bío, dio inicio a un ciclo de capacitaciones en las cocinerías del Mercado Municipal de Chillán, en el marco del proyecto de Vinculación con el Medio VCMR2025-06, titulado “Implementación piloto de prácticas sostenibles e inocuas en el abastecimiento de materias primas alimentarias, en cocinerías del Mercado Municipal de Chillán”.

La iniciativa es liderada por la académica del Departamento de Nutrición y Salud Pública, Dra. María Paula Alarcón Lavín, y se desarrolla con la activa participación de estudiantes de la Escuela de Nutrición y Dietética. El trabajo contempla talleres prácticos dirigidos a las locatarias del mercado, enfocados en la reducción de mermas, la mejora de las condiciones sanitarias y el fortalecimiento de la calidad e identidad gastronómica local.

El plan piloto considera metodologías participativas que incluyen el diagnóstico conjunto de prácticas actuales, el diseño de planes operativos personalizados y un acompañamiento técnico en terreno, permitiendo que las cocineras incorporen herramientas concretas para optimizar sus procesos de abastecimiento y manipulación de alimentos, resguardando la inocuidad y promoviendo la sostenibilidad.

Desde la FACSA, el proyecto destaca por su impacto formativo y territorial. La Dra. María Paula Alarcón subrayó que “Con esto, queremos plasmar el compromiso de la Facultad y de la carrera de Nutrición y Dietética con una formación vinculada a las necesidades reales del territorio. Las estudiantes no solo aplican conocimientos técnicos, sino que desarrollan competencias profesionales, sociales y éticas, trabajando directamente con las cocineras y contribuyendo a mejorar sus condiciones laborales y la calidad de los alimentos que ofrecen a la comunidad”.

Asimismo, la académica enfatizó que el trabajo colaborativo con el Mercado Municipal de Chillán permite fortalecer la identidad culinaria de Ñuble y proyectar este espacio como un polo gastronómico regional confiable y competitivo, poniendo en valor el rol de las manipuladoras de alimentos, en su mayoría mujeres, como actores clave del patrimonio alimentario local.

La implementación de este plan piloto abre nuevas oportunidades para optimizar la gestión alimentaria en cocinerías tradicionales, integrando criterios de sostenibilidad, inocuidad y eficiencia. La experiencia permite articular formación profesional y desarrollo local, proyectando al Mercado Municipal de Chillán como un referente gastronómico que pone en valor la calidad, la seguridad alimentaria y la identidad culinaria del territorio.