martes 20, mayo, 2025

Universidad del Bío-Bío y Rotary Club Chillán Centro promueven la inclusión digital de personas mayores

Con mucho entusiasmo y espíritu colaborativo se realizó el primer taller del proyecto “Mi Celular, Mi Compañero”, iniciativa impulsada por la Universidad del Bío-Bío en alianza con el Rotary Club Chillán Centro, que busca fomentar la alfabetización digital en personas mayores del Club de Adulto Mayor Alegría del Hogar de Chillán.

La jornada reunió a personas mayores autovalentes, acompañadas por estudiantes voluntarios de las carreras de Enfermería y Fonoaudiología de la Facultad de Ciencias de la Salud y de los Alimentos (FACSA-UBB), quienes participaron como monitores y facilitadores del aprendizaje.

La académica del Departamento de Enfermería y responsable del proyecto, Mg. Cecilia Pinto Santuber, valoró profundamente la experiencia, destacando tanto el aprendizaje técnico como la conexión humana que se generó durante la actividad: “Abordamos contenidos prácticos como el uso de WhatsApp, envío de mensajes, fotografías y videollamadas. Pero lo más significativo fue observar cómo la empatía, la cercanía y el respeto crearon un ambiente donde el aprendizaje fluyó de forma natural y afectiva. Fue un intercambio de saberes y emociones que superó nuestras expectativas”, señaló.

También participó el Mg. Álvaro Silva Arriagada, coordinador de Campos Clínicos e Intersectoriales de la UBB, quien entregó un saludo institucional, destacando el valor de la iniciativa y el compromiso de los involucrados. Durante la jornada, hizo entrega de presentes a las y los asistentes, reconociendo su participación y dedicación.

En el desarrollo del taller se destacó la labor de las estudiantes Valentina Fuentes y Bárbara Espinoza, de la carrera de Enfermería, por su liderazgo, capacidad de organización y trato cercano, fundamentales para el buen funcionamiento de la actividad. Igualmente, se valoró el apoyo de Fernando Huichalao (Enfermería) y Diego Contreras (Fonoaudiología), quienes brindaron una asistencia clave en el uso de herramientas tecnológicas, facilitando el aprendizaje de forma dinámica y accesible.

Al cierre del encuentro, una de las monitoras compartió su testimonio: “Fue muy gratificante ver el interés de las y los participantes. Verlos llamar a sus familias aplicando lo aprendido en el momento fue emocionante. Y también fue bonito ver a mis compañeros motivados, con ganas de ayudar. Todo salió muy bien afortunadamente”.

Este primer taller representa un paso significativo en la implementación del proyecto, que continuará abriendo espacios de inclusión digital para personas mayores, promoviendo el aprendizaje compartido y el fortalecimiento del vínculo intergeneracional desde una perspectiva participativa y transformadora.